Me la paso en el gimnasio, ya ni me acuerdo cuando ni cual fué el último libro que leí. Tengo más entrenado el trasero que la mente, es de extrañarse que el pensar con el orto se vuelva atípico.
Y con la excusa de comprarme un par de libros sucedió que, vidriera vá... vidriera viene, terminé satisfaciendo mis impulsos consumistas, fundiéndole la plata a mi vieja en kilos de ropa, felizmente perdiendo tiempo probandome ropa y olvidándome por completo de los libros. La culpa no se hizo presente en los instantes que la necesitaba xDLe comento la situación a mi vieja: -¡Rachel, ultimamente ando hecha una rubia hueca oxigenada que se la pasa en el gimnasio! La frivolidad que odio; la fuerza de la que siempre he huído es la que me está alcanzando(?)... Necesito intelectualizarme (?) ¡vamo' a comprar libro' laputaqueloparió!-
Ésto para muchas seguramente debe ser algo normal pero para mí no, no banalizemos el tema tampoco, esto es grave para mí y talvez para la sociedad (?) (no bueno, me fuí un poco al carajo, a la sociedad no le preocupa tener una pendejita huecamente consumista más). A ésto lo cuento como una de esas cosas de las que una se avergüenza de que la hagan felices ._.
Contándo ésto como si no hubiera mañana(?)... como si a alguien le fuera a interesar, lo cuento! :D
Resulta que últimamente, como les decía no me la paso en casa, me pueden encontrar intoxicándome en cualquier lado menos en mi casa, no mentira, en mi casa también :P y la cosa es así:
El finde pasado habia quedado de salir con una amiga pero me dejo de cara y estar en casa = me pinta la fucking depre = cajita de vino tinto con alprazolam para poder dormir por que sino no duermo y necesitaba que se fuera el finde (¡Imagináte la desesperación por pasar el fucking día que tome vino en cajita! D: ) = 18 horas de ininterrumpido y BEIO sueño *-*
Bueno me voy a lavar la cara y me encuentro con mi hermano, que hace poco se fué de vivir de casa, el cuál me invita a que vaya a acompañarlo a su trabajo por que según él estaba solo. Vá la Lu toda hecha un escracho lalalalaa ♫ llega al taller mecánico y se encuentra con el croto pero simpático y dable drogón del amigo de su hermano. OH FUCK! y bue, cerveza va, cerveza viene... vino va, faso viene xD Terminé fumando de la maría que se puede conseguir en los suburbios de aquel humilde barrio donde nuestro muy poco querido agricultor con tal de vender mezcla sus cultivos con yerba mate al parecer, junto con otros yuyos y especias dando como resultado una mercancía de muy pésima calidad, la cuál te hacía subir demasiado rápido provocándote seguidamente el peor enemigo que puede tener una pendeja obsesionada con su cuerpo: EL BAJÓN.
Ahh... necesitaba espiritualizarme y relajarme un poco pirippipripii ♫ y el asunto es que se me quedó patente la constante mirada obsena(?) de aquellos ojos drogados de éste chabón (naa.. fuertísimo! Demasiado romántico lo mío eh!). Puta madre! ¿Por qué siempre tendrán que poderme los vagos con ideología media hippie? Pero que pendeja idealista de mierda que soy! u.u o tal vez simplemente sea la reencarnación de alguna hippie de los 60' que se murió de sida (?) :| ♪ Y dentro de su cuento ella era cenicientaa, su príncipe era un hippie de los años sesentaaa... ♫♫
OMG! que manera de hablar tantas boludeces juntas! después se quejan de que soy callada ¬¬Y bueno, no sé a que iba todo ésto, creo que la cagué con un par de párrafos de más! xD Ahh... la falta de lectura. Pff... hablo como si alguna vez hubiesen sido coherentes las cosas que salen de mi cabeza.
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